Como es posible abordar un río de lágrimas hasta la extenuación,
si en el aguante de los párpados pesados
quemaron la preñez del sentimiento para evitarlos afligirse.
Es mi mar un mar muerto,
donde cada sensación queda fría en la intemperie
y congelada en su centro,
se posa inerte evitando cualquier roce que la erice
sintiéndome un oasis vacío.
Cada ola es invertida irónicamente en su rebelión
y revuelta se prodiga dueña de un océano de emociones encarceladas,
pues el miedo siempre aparece
sintiéndome devorada en su devenir extendiéndose.
Mi pasado no hace acopio de recuerdos
y olvida severamente la ingenuidad de la niñez,
de amar despierta, entregando el corazón,
pues las heridas vertidas en la piel que amó le recuerdan siempre
que amar fue una indolencia.
Sé, que carezco de muchos dones,
más la lucha desde mi humildad con mi mundo
es perseverar lo que el olvido devastó en ésta ausencia,
de ser sombra y sima,
para creer en la conjunción de dos almas en conexión pariendo vida.
Convence y me vence ésta razón.
Quizás exija a la existencia lo que no me pertenece...
Yayone Guereta.
Es un viaje a lo existencial, mi querida amiga. Un intimismo desnudo saliendo al exterior, vertiendo al aire el pensamiento a viva voz.
ResponderEliminarTan melancólico como bello, Yayone.
Mil besitos de sábado, preciosa.
Desde la intensidad del sentir más profundo que hasta oprime el pecho, existencialismo supremo.
ResponderEliminarBesos, bella Ana.
Ese tesón de tu corazón y la humildad que lo acaricia tienen un gran futuro.
ResponderEliminarSeguro que sí.
Besos.
Ni más ni menos que el tuyo, Toro, gracias siempre.
ResponderEliminarBesos.
Bellissimo, abrazos
ResponderEliminarGracias, kike, una alegría reencontrarnos.
EliminarBesos.
Un río caudaloso de sentimientos que hacen grande este poema. Un abrazo.
ResponderEliminarTodo un honor tu presencia y tu hermosa huella en mi rincón.
EliminarGracias, Luis.
Un beso grande.
Sensacionales versos Yayone...siempre logran conmoverme. Besos y abrazos miles!!!
ResponderEliminarGracias, Marina, un verdadero placer que te lleguen y los sientas.
ResponderEliminarBesos, preciosa.
Conmovedora tu forma de plasmar y de hacer que tus sentimientos toquen el corazón del lector.
ResponderEliminarLa fuerza de tu corazón llegará allí donde se proponga.
Feliz tarde de domingo.
Querida Yayone.
Besos,amiga.
Así sea, mi querida Carmen. Igualmente feliz tarde de domingo.
EliminarBesos, amiga.
La belleza de los sentimientos y la voluntad del alma que se va reflejando en tus palabras como un campo abierto hacia el futuro, hacia la vida...
ResponderEliminarUn abrazo amiga.
Respiremos pues ésta vida y llenarnos copiosamente de ella, Servilio.
EliminarUn abrazo amigo.
Poema triste al tiempo que esperanzador, porque sí, a la vida hay que pedirle de todo, que de negarlo, en tal caso, ya se encargará ella, pero por pedir felicidad que no quede, y por luchar por ella, tampoco, aunque sea mediante la belleza de versos como estos, querida Yayone. Comparto, preciosa. Muxus y muy feliz domingo :-))
ResponderEliminarSiempre se ha de luchar, somos mujeres con arrestos querida hermana, ya es la hora, de la felicidad.
EliminarMuxus todos, Mayte, politori.:-)
Tus poema no es sólo una sucesión de versos: es una oración rezada a la niña que aún pervive debajo de la piel, esa que aún es capaz de creer, una oración por ella, para que siga resistiendo, para que no se dé por vencida, para que no pierda la esperanza.
ResponderEliminarComparto tus letras como si fueran mías propias, mi hermana de letras.
Besos.
Tu huella es siempre un bálsamo para mi sentir, hermano querido.
EliminarMe doy más que por satisfecha de tener un pedacito de ti.
Besos.